Opinando acerca de mi profesión en mi país...
Los seres humanos siempre han tenido la tendencia de dividirse, separarse y juntarse de acuerdo a sus características, razas, formas de pensar y gustos. Esto no deja de ser una excepción en esta época, mucho menos en este país, tan lleno de controversias. Controversias desde todo punto de vista, que comienzan por la azúcar y terminan en el aceite.
Y mientras más avanza este gobierno y su extensión en esta década y la siguiente, sigue avanzando la división, que por supuesto se refleja completamente en los medios de comunicación; espejo claro de los miedos y las inseguridades de cada venezolano a la hora de expresarte con el primer pensamiento vago que atienda a su cerebro.
El periodismo numero 1
Es el periodismo superlativo de lo maravilloso, adjetivos positivos abundantes, naturaleza, sociedad, seguridad, cultura, economía, el periodismo amante y esposa de la revolución socialista, que persigue el actual gobierno, todo posible aspecto de un país perfecto, se traduce a una sola palabra: Venezuela. Aquí realmente no sucede más allá, ni más acá de lo transmitido a través de este sector, cualquier noticia negativa, que se relacione con el contexto venezolano, es pura coincidencia.
Periodismo numero 2
Es el Periodismo superlativo de la tragedia, de lo negativo, adjetivos y sinónimos del desastre unidos en un solo país. Descontrol, corrupción, inseguridad, todos los sectores que manejan el cerebro del país no funcionan, nación deplorable totalmente. Antónimo puro del periodismo numero 1, todo lo que aquí sucede es absolutamente y completamente malo, casi insufrible, da un aire de “final de los tiempos”.
Alentando a creer que peor que esto, no hay nada, o quizás sí, Cuba. Termina por desesperar a cualquier persona que se alimente de estas informaciones, casi deseando morir, o pensar seriamente en irse lo más pronto posible del país, antes de que Chávez se vuelva Fidel, o Venezuela se convierta en Cuba. Este es el Periodismo enemigo a muerte de la revolución roja, cualquier evento, hecho y acontecimiento de regocijo, alegría, o prosperidad que aparente desarrollarse en el contexto venezolano es pura coincidencia.
Periodismo 0
Periodismo donde se intenta cansadamente, con un esfuerzo infinito, que cuenta con un previo cuidado minucioso, la imparcialidad, tratar de informar cualquiera de las dos realidades, sin exagerar mucho una cosa o la otra, cumpliendo todas las normas establecidas por la constitución, y o el presidente y sus decretos extraordinarios, opinar solo en aquellos casos de suma importancia, cuando ocurren sucesos que lo ameriten, sin pausa pero, sin prisa, sin miedo, pero con mucha precaución, el periodismo que informa como si se caminara en una cuerda muy floja.
La verdad, en realidad entonces nunca existió o existirá en ninguno de estos 3, difícilmente y se puede comunicar algo, esperar que esto sea veraz ya es mucho pedir, creer en cualquiera de los tres seria utilizar una venda de algún color, o una sin color alguno, pero una venda al fin y al cabo.
Con revolución o sin ella, el periodismo debería acatar solo como ley de vida, la verdad, pero no es así, hoy en día el periodismo no vive, el periodismo sobrevive. En estas circunstancias, pedir que cambie, es pedir que no viva, que deje de sobrevivir, es simplemente pedir que se lance al vacio, sabiendo que morirá.